Luna de vereno D.J.L.F |
Y decir que la noche es para el luto
cuándo la luciérnaga alumbra su fulgor
y sigiloso se escapa el eco.
Luto dicen de la noche
cuando los druidas avezados
encienden sus calderos
y la sabiduría emana, sin remedio.
Que de luto se viste la noche, comentan
y en la libertad los pensamientos
que el día envuelve con su luz
se aclaran, más si cabe, en la oscuridad.
De luto abanderada la noche,
cuando la diversión llega a su culmen
enjaulada en ebrias batallas
que el día sabrá pagarlas.
Enlutada la noche velada
y la luna esplendorosa y plena
despliega la otra luz,
esa luz tan suya, tan extraña.
Cuánto luto circunscrito a la noche
y las sirenas sonando en el prado,
llamando a los seres a la lujuria,
que se entregan ávidos al placer.
Qué luto más irracional el de la noche,
cuyo desdén sólo necesita alejar a la masa
del verdadero sentido de su luz,
tan sagaz, tan denodada.
Un luto sin muerte, insurrecto,
para el alma del valiente,
para la noche de los genios.
Diego José López Fernández
09-04-2019
Diego José López Fernández
09-04-2019
No hay comentarios:
Publicar un comentario